Arroyo Szinva

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El Arroyo Szinva, un símbolo querido por la gente de Miskolc, nace por encima de Lillafüred y fluye de oeste a este a través de la ciudad antes de unirse al río Sajó. Mencionado ya en el siglo XIV bajo el nombre de Synwapataka, en su momento impulsó numerosos molinos de agua y serpenteó por los más de 70 puentes de la ciudad, lo que le valió a Miskolc el apodo de "Pequeña Venecia". Sin embargo, la devastadora inundación de 1878 marcó el fin de la era de los molinos. En el siglo XX, las medidas de control de inundaciones llevaron a la regulación del arroyo, con secciones concretadas o pavimentadas, aunque una gran inundación aún ocurrió en 2010. Los manantiales del Szinva en las montañas Bükk proporcionan agua de alta calidad y, desde 1964, han abastecido parte del agua potable de Miskolc. A lo largo de sus orillas se encuentran puntos de referencia como Lillafüred, hogar de la cascada artificial más alta de Hungría, y la Cueva de Piedra Caliza Anna. En las secciones del centro de la ciudad, el Szinva desempeña un papel integral en la vida urbana. En la Plaza del Papa Juan Pablo II, un diseño escalonado permite el acceso directo al agua, donde los niños disfrutan alimentando a los patos. El arroyo reaparece cerca de la Plaza Isabel y la Terraza Szinva, fluyendo junto a bares en ruinas, tiendas y la estatua de Mancs, el famoso perro de búsqueda y rescate. La cascada artificial y los candados del amor añaden un encanto romántico a la zona. La última parada del Szinva en Miskolc es cerca de la Estación de Ferrocarril Tiszai, donde fluye tranquilamente para unirse al Sajó. El arroyo da vida a la ciudad, atravesando el centro y simbolizando el movimiento perpetuo de Miskolc.